Por Gabilú Mireles– ¿Podrías comer chocolate mañana, tarde y noche? Cuando te dan elegir, ¿siempre eliges el helado de chocolate? ¿Y secretamente tienes la fantasía de tener un BRUCE, BRUCE, BRUCE! MOMENT? -Ya sabes, como en la película de Matilda…
¿No? ¿Sólo soy yo? Bueno, si tu obsesión amor por el chocolate es intenso como el mío o si eres de darte el gusto de repente, querrás tomar nota y armar tu mapita de estas chocolaterías en la Ciudad de México donde el menú entero es un paraíso para chocolate lovers:
TOUT CHOCOLATE – Condesa y San Ángel
Con aires franceses, al estilo Moulin Rouge, estos spots en Ámsterdam y el Mercado del Carmen trata al chocolate como una creación artesanal digna de presumir en el aparador. Sufrirás un poco al tratar de elegir sólo uno, así que no lo hagas y prueba varios de sus sabores gourmet.
QUÉ BO! – Cuauhtémoc
Jamaica, maracuya, Gansito y Oreo son algunos de los sabores que encontrarás en esta chocolatería exótica en Isabel La Católica. Los colores y splashes de colores le quitan todo lo tradicional a este milenario postre. También puedes probar su pozol -bebida de caco- bien frío, servido en jícara.
LAMPUGA – Condesa, Polanco y Roma
Antojo de chocolate desde temprano, ¿por qué no desayunar unos waffles bañados con cacao? Si ya es la hora de la comida, pídete uno de sus postres chocolatosos, como el ganache, ¡que les queda increíble!
LA CASA TROPICAL – Por pedido
Barras, nibs de cacao tostado y las hojas del cacao para hacer infusiones son parte de la oferta del diseñador y maestro chocolatero Héctor Galván, quien en este lugar ha creado, no sólo una proovedora de chocolate, si no un paraíso para los aficionados del chocolate.
Degustación de tres chocolates + mezcal. Estamos abiertos hasta las 7pm.
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DOLCENERO – Condesa
Por fuera parece una galería e arte y, de hecho, por adentro también lo es, pero las obras están hechas con chocolate. El chef Mauricio Montiel toma inspiración en las obras de Dalí y Miró para crear formas distintas con el cacao, perfectas para una experiencia diferente a la hora de comerlo.
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BELMONDO – Polanco y Roma
Si tú, como yo, quedaste un poco traumado/obsesionado con aquella escena de la película de Matilda en la que el valiente Bruce lograba acabarse un enorme pastel de chocolate cubierto de un perfecto betún del mismo sabor. Pues en esta restaurante tal vez se nos cumpla nuestra fantasía, pues su
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MUSEO DEL CHOCOLATE – Juárez
Por que no todo es gula en esta lista, puedes pasar una tarde cultural aquí, participar en las catas y talleres de cacao y, ¿por qué no? Comprar un souvenir… ¡de chocolate!
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