Por Gabilú Mireles– Nadie cree que es posible, hasta que sucede. Te miras al espejo a tus veintitantos y te topas con unas líneas abajo de los ojos, pero te convences a ti mismo que son ojeras.

Después tienes un par de malos días en la oficina y unas cuantas desveladas, aparecen otras rayitas más profundas que apuntan hacia las orejas.

Ya no hay cómo huirles, te están saliendo arrugas ¡a tus 20s! Si ya estás ahí, no es demasiado tarde. Y si eres afortunado y todavía no sientes la presión de los años, no te lo tomes tan a la ligera y mejor aplícate para identificar estas 6 razones por las que te puedes arrugar antes de los 30:

 

1. EL ESTRÉS

Estás en la oficina y tu jefe se altera, tus compañeros reaccionan y tú te unes al drama. Y esto pasa todos los días. En la calle, el tráfico te pone de malas; y el ex ya subió fotos con su nuevo catch. Todo este estrés hace estragos en tu piel, la deteriora, tu rostro pierde volumen y da pie a líneas de expresión y acné. Así que mejor suelta y que se te resbale. Tú en zen y con la piel relajada.

 

2. POR NO LIMPIARTE LA CARA

No sólo las mujeres deben lavarse la cara todas las noches para quitarse el maquillaje. La contaminación en el aire, el polvo que nos rodea y las bacterias que llegan a nuestro rostro -a través de nuestras manos, el contacto con los teléfonos, etc.- son razones suficientes para invertir en un limpiador facial y lavarla día y noche ¡sin falta!

Elige un limpiador que funcione para día y noche; toma en cuenta tu tipo de piel.
Elige un limpiador que funcione para día y noche; siempre toma en cuenta tu tipo de piel.

 

3. POR NO BEBER TÉ VERDE

Tomar té verde de manera cotidiana ha probado ser una gran manera de prevenir arrugas. Esta bebida contiene catequinas, un poderoso antioxidante, excelente para la piel. Elige té de hoja entera en lugar de bolsa, para que durante la infusión se pueda rescatar el mayor número de propiedades.

 

4. POR NO USAR CREMA PARA OJOS

La piel alrededor de los ojos es la capa más delgada de todo el cuerpo y, por lo mismo, la más sensible. Por eso, es crucial darle el cuidado necesario y elegir una crema especial para esta zona, y evitar que no se arruge o se dañe.

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No te dejes llevar sólo por recomendaciones de otras personas. Identifica tu tipo de piel y elige la crema que sea para ella.

 

5. POR NO DORMIR BIEN

No basta con dormir tus 8 horas diarias. Dormir y descansar correctamente -es decir, sin pasar las últimas horas en la cama con la luz de tu smartphone o el iPad en la cara- es vital para que no parezcas una pasa a los 28. Cuando duermes, la piel se regenera de los daños del día anterior y produce nuevas células, pero si no la dejas trabajar, ¡dile hola a las arrugas!

 

6. POR NO PONERTE BLOQUEADOR SOLAR

No sólo te protege de quemaduras de sol y cáncer de piel -¡que ya por eso deberías usarlo!- también está comprobado tenerlo en rutina diaria ayuda a disminuir las arrugas, manchas y la pérdida de elasticidad que provoca la exposicion a la radiación ultravioleta del sol.

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No uses en tu rostro el bloqueador solar que aplicas en el resto del cuerpo. Busca uno diseñado para la piel de la cara, pues no tapará tus poros.