Por Danny Leal Tengo que confesar que soy adicta al maquillaje -literal- gasto más en maquillaje que en ropa o zapatos, perdón dije gasto y debí decir invierto, porque considero que el maquillaje es una inversión, en especial con productos de calidad como los de la línea Lancôme.

De hecho, tienen un nuevo lanzamiento, el Juicy Shaker.

Es un gloss, pero no es cualquier gloss, para empezar la sensación no es pesada, como la de los brillos labiales. Yo era más de labiales que de brillos, y era en gran parte porque no me gusta la textura chiclosa, pero este gloss no la tiene, es tan ligero que no siento que lo traigo puesto.

El producto te enamora desde su presentación, es diferente, original y brillante, además de segura porque lo traigo en mi bolsa y no se derrama. El envase simula al clásico shaker de un bartender. La idea es que recuerdes que debes agitarlo antes de usarlo porque el producto es bifásico y tiende a separarse.

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¿Por qué es bifásico? Porque tiene doble propósito, además de aportar un color y brillo súper natural a tus labios, también es un hidratante, lo cual es genial. Adiós a los labios partidos o resecos.

Creo que mi cualidad favorita del Juicy Shaker es el color, al verlo en el envase pensé que sería un color muy intenso, lo cual me desanimó en un principio porque yo estaba buscando un labial o gloss para uso diario, pero cuando lo probé descubrí un color muy hermoso, perfecto para usarlo todos los días mientras trabajo, mis labios lucen naturales, pero aún así resaltan, sin llegar a verme exagerada.

Además, la gama de colores es genial, tengo que admitir que fue difícil decidirme por un color, creo que te pasará lo mismo cuando te los pruebes. ¡Los quiero todos!

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