Por Gabilú Mireles– Gregory Emvy siempre supo que su vida giraría en torno del arte. Desde muy pequeño, ha dibujado en cualquier superficie que encontraba, incluyendo las paredes del departamento de su familia.
«Ya estaba expresando mi punto de vista sobre el mundo desde entonces», recordó el artista, quien estudió en el programa de arte en Nizhni Nóvgorod, Rusia.
Ahora, Gregory se dedica al 100% a su pasión y ha llegado a México para conquistarnos con su obra.
«Divido mi tiempo entre mi estudio en Moscú, Londres -donde exhibo en varias galerías- y México. Aquí me gusta el clima, la increíblemente deliciosa cocina, me gusta la gente, son muy abiertos y amables. Seguido voy a los museos mexicanos y puedo pasar, no horas, días viendo y tomando notas. Eso me inspira mucho».
Sobre su proceso creativo, Gregory compartió que un momento muy personal que sucede en su espacio, sucede en las mañanas, cuando llega a su estudio, toma una brocha, pone colores en una paleta y comienza a trabajar. Siempre lleva consigo un cuaderno para anotar nuevas ideas, lo cual seguido sucede cuando está de viaje.
«La inspiración es como una bocanada de aire para mí. Eres un pájaro, encuentras la brisa y te dejas llevar. Mi inspiración viene de la gente, arquitectura, moda».
