Por Hanne Engels– No se puede vivir con tanto estrés, la vida cotidiana puede ser o no ser muy estresante; depende de ti. No hay excusa que estés cansado o muy ocupado, con solo 5 minutos de meditación al día sentirás la diferencia.
Es cuestión de hacer el hábito. Al principio es difícil, pero con la práctica, día a día notarás la diferencia. Si de plano no puedes, empieza por meditaciones guiadas. Un año completo, yo sólo medité con guía hasta que pude sola, no te desanimes. Hay muchas herramientas para que día a día sea mejor y más efectivo, la app que más me ha gustado es Headspace, pero hay muchas más.
Les comparto estos tips para que tengan menos estrés y más energía:
1. Encuentra el tiempo: No importa si son 5 minutos o 10 al día, aunque si quieres avanzar más rápido, al principio necesitarás más tiempo. Pon una alarma en tu celular.
2. Percibe tu alrededor: Identifica los sonidos que te rodean y, simplemente, contémplalos, pueden ser un foco o una distracción, dependiendo de ti.
3. Siéntate cómodo: No tienes que tener la postura perfecta, con el tiempo vas a ir perfeccionando esto.
4. Cuenta tus respiraciones: Una de las mejores maneras de meditar es contando los segundos de inhalación y exhalación o ir de 10 en 10 respiraciones poniendo atención en cómo entra el aire por tu nariz y sale por tu boca después.
5. No te desesperes: La práctica hace al maestro, hay gente que tiene más actividad mental que otra. No tires la toalla, si se te complica las primeras veces. Cuando empieces a sentir los beneficios estarás feliz.
6. Apaga tu celular: No hay mayor distracción que de pronto, cuando por fin habías logrado desconectarte, suene tu celular. Apágalo o ponlo en modo avión para evitar esto.
7. Encuentra tu horario: Hay gente que puede meditar mejor cuando recién se despierta y otros antes de dormir o a medio día. Saber qué es más fácil para ti te ayudará a tener menos pretextos y, una vez que lo hayas dominado, empieces a hacerlo a otras horas, el chiste es que llegues al punto de hacerlo cuando lo necesites.
8. Mantras: Recitar mantras ayuda mucho mientras aprendes porque te ayuda a concentrarte en algo, además de los beneficios que por si solo tienen de recitarlos.
9. Inciensos o aceites esenciales: Respirar incienso o usar aceites puede ayudarte a inducir un estado meditativo súper fácil.
10. Velas: Si lo haces de noche, pon una vela frente a ti y «contémplala» con los ojos cerrados; es un gran ejercicio.
¡Feliz Meditación!
