Por Gabilú Mireles– ¿Cuando piensas en polka dots piensas en Minnie Mouse y sus tiernos moños y vestidos a lunares? ¿Sólo me pasa a mí?

Este estampado con puntitos por todas partes puede llegar a usarse de manera muy femenina que raya en lo cursi, pero en Otoño-Invierno 2017, los polka dots tuvieron un makeover y se volvieron un print must-have.

Los lunares redonditos ya no son la norma, ahora se vuelven más irregulares, grandes y chicos y se imprimieron en abrigos grandes o vestidos con cortes inesperados.

Las firmas Altuzarra y MSGM los distorsionaron y les dieron un giro más arriesgado.

La primera casa -del francés Joseph Altuzarra– propone una silueta femenina y pone lunares pequeños de distintos colores en blazers, faldas y vestidos.

La segunda firma -del italiano Massimo Giorgetti– saca a los lunares del contexto tierno y los agranda para cubrir por completo sus abrigo extra grandes. También los contrasta en dimensiones en vestidos body-con, demostrando que los lunares pueden tener su lado atrevido.