Por Gabilú Mireles Tal vez  fue por que nació en la playa o quizás eso tuvo poco que ver, pero desde pequeño, Eduardo Andrés tuvo una inquietud insaciable por viajar y conocer nuevas culturas.

He ran away in his sleep and dreamed of paradise

Una foto publicada por Eduardo Andrés (@eduardoandreshr) el

A veces toca sufrir los sábados #CostaCareyes

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Su aventura comenzó a los 17 años, cuando cursó un año de preparatoria en Alemania. Junto con un grupo de nuevos amigos, recorrió Europa, aprendiendo detalles de las ciudades que visitaba, tomando fotos, perfeccionando el idioma local.

Al volver a México, era hora de regresar a estudiar, pero este joven quería más. Su hambre de aventura lo llevó a escaparse de nuevo, ahora a Curitiba, Brasil, para aprender portugués. Después, siguió Australia. Luego, París.

Su cuenta de Instagram se volvió su diario de viajes y, ahora, Andrés decidió documentar todos sus destinos en un nuevo blog, El Gypsetter, donde relata lo mejor de sus viajes y sus recomendaciones en cada parada.

 

Drapetomania • An overwhelming urge to run away??

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Aún residiendo en México, Andrés no deja de viajar y alimentar su corazón de gitano/trotamundos. Si él puede, ¿por qué tú no?

Enseñando piernish y pansish

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Be the game changer

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