Por El Influencer– A pesar de que aún seguimos buscando la fuente de la eterna juventud, la ciencia y la medicina han encontrado alimentos que benefician considerablemente la salud de nuestras células y que comparten en común dos propiedades: primero reducen la inflamación del cuerpo y, segundo, poseen cantidades mínimas de azúcar.
Esto es lógico si recordamos que tanto el almidón como el azúcar son algunas de las principales causas de envejecimiento, pero ¿qué debemos comer entonces para contrarrestarlo?
Aceite de oliva y granos enteros para cuidar el corazón
Un estudio, realizado en España, sobre los efectos de la dieta mediterránea en personas con un alto riesgo de ataques cardíacos encontró que quienes consumen cuatro cucharadas de aceite de oliva diario tenían un 30% menos riesgo de tener un ataque al corazón y contrarresta los efectos inflamatorios que produce la carne en nuestro cuerpo.
Además de esta grasa saludable, los alimentos integrales, que incluyen las tres partes del grano (salvado, arroz integral, avena, quinoa, y cebada), son protectores del corazón porque contienen fibra que ayuda a bajar el colesterol, y vitaminas B y magnesio, necesarios para la salud cardiovascular.
Por otro lado, las pequeñas cantidades de alcohol (una a dos porciones al día para los hombres, y una para las mujeres) también pueden ayudar al corazón al disminuir el riesgo de inflamación arterial.
Verduras sin almidón y crucíferas contra el cáncer
Los vegetales no almidonados (acelga, berenjena, calabaza, tomates, chayote, espárragos, hongos, pimiento… la mayoría excepto papa, camote, frijoles, maíz u otros que incluyan carbohidratos) promueven la protección de las células; mientras las crucíferas -cuyo nombre deriva sólo por la familia a la que pertenecen- han demostrado su poder para inhibir las mutaciones al cáncer de las células al atrapar los radicales libres y evitar daños en el ADN; éstas son el brócoli, la col, coliflor, coles de Bruselas, acelgas, rábanos, colinabo, nabos y berros.
Pescado y café: boosters para el cerebro
Todos los alimentos antiinflamatorios de bajo índice glucémico(es decir, con bajas cantidades de azúcar) protegen al cerebro contra el envejecimiento, pero la grasa omega-3 DHA es particularmente importante para la función cognitiva. El salmón y la trucha contienen cantidades consistentes de este nutriente, sin embargo, un estudio de 2016 encontró que comer incluso pequeñas cantidades de cualquier tipo de pescado reduce el riesgo de cambios cerebrales asociados con la demencia.
El café también puede proteger la agudeza mental. Estudios demuestran que los cerebros de los bebedores regulares del café tienen una velocidad en procesos mentales de alguien 6 años más joven.
Pero sólo se recomienda para aquellos que metabolizan rápidamente la cafeína, o que pueden tomarlo sin experimentar dolores de cabeza, arritmias cardíacas, ansiedad o trastornos gástricos; ya que el verdadero beneficio se ha demostrado al tomar más de seis tazas al día.