Por Karen Luna – Si decidiste cumplir tus propósitos de hacer ejercicio y viajar más, pero la idea de mantener tu hábito de yoga en una escapada de fin de semana o en tus vacaciones en la playa te resulta todo un reto, no te preocupes.
El hecho de que estés de vacaciones no significa que tengas que interrumpir tu práctica, pues hay rutinas cortas pensadas para esos días en los que buscas alejarte del ajetreo, sin dejar de lado tu entrenamiento. Lo único que tienes que hacer es adaptarte a tu nuevo entorno, buscar un espacio adecuado -un piso suave- y destinar un momento en el día que dedicarás ti mismo.
Karla Avelar, health coach, socia y maestra en Green Yoga, nos mostró una rutina que podrás hacer estés en donde estés. ¡Ya no hay pretextos!
Empieza realizando 5 repeticiones de la secuencia básica en el yoga saludo al sol A y sostén 5 respiraciones largas y profundas en perro boca abajo.
Continua con 5 repeticiones del saludo al sol B -que es la misma que el A, pero incluyendo la postura de la silla y primero y segundo guerrero– y sostén 5 respiraciones largas y profundas en perro boca abajo.
A continuación, pasa a los estiramientos en el piso. Realiza torsiones sosteniendo 10 respiraciones en cada una. Las personas con poca flexibilidad pueden utilizar suplementos como cojines, bloques y tiras para ayudarse.
Después, sentado con las piernas extendidas, derrítete frente a tus pies y sostén 15 respiraciones en esta posición. Termina con una práctica meditativa, en medio loto o loto completo realiza de 10 a 20 respiraciones mirando a un punto fijo sin distraerte.
Para cerrar tu práctica, es importante que te quedes al menos 5 minutos en savasana pensando únicamente en la respiración. Después de esto, siéntate en postura fácil para agradecer tu práctica y el tiempo que tuviste para ti mismo. Namaste.